Pronunciamiento de Tierra y Libertad ante el Mensaje Presidencial
HUMALA: SIN ANUNCIOS DE JUSTICIA SOCIAL Y ECOLÓGICA
Como ya lo saben los pueblos que esperaban algunas medidas esperanzadores en la política económica y social, el Mensaje Presidencial del 28 de julio no fue pensado para anunciar los cambios que el país necesita para construir una sociedad justa, más democrática y ecológicamente sustentable.
El presidente Ollanta Humala ha preferido contentar a la CONFIEP y a los poderes económicos y políticos con los que hoy gobierna el país.
Por ello en su mensaje no hubo ningún anuncio sobre la reforma del sistema político que impida “repartijas” como la rechazada recientemente por inmensas multitudes ciudadanas en las calles. Nada de renovación de cargos congresales por tercios, nada en relación al financiamiento público de los partidos para evitar que sean comprados por grupos económicos, ninguna nueva regulación concreta para combatir la corrupción y el lobismo que deslegitima a los partidos y a las principales instituciones del Estado.
Igual vacío tuvo el mensaje presidencial frente a los reclamos de respeto a los derechos de los trabajadores públicos y de la ciudadanía. Nada sobre la mejora sustantiva de la calidad de los servicios públicos, no recogida adecuadamente en la actual ley de servicio civil; tampoco sobre la derogatoria de la discriminatoria ley del servicio militar.
Para este gobierno crecer económicamente no significa fortalecer la democracia y asegurar la sostenibilidad ecológica y los derechos de los pueblos indígenas planificando territorialmente el desarrollo; por eso tampoco ofreció ningún anuncio sobre la modificación de las leyes de criminalización de las protestas, la publicación de la base de datos de los pueblos indígenas o sobre las garantías para el proceso de consulta previa; ni nada sobre la aprobación de la ley de ordenamiento territorial o el debate de la propuesta de ley de protección de cabeceras de cuencas o de la prohibición del cianuro y el mercurio en la minería, o sobre garantías para la protección del patrimonio arqueológico.
A diez años de la Comisión de la Verdad y Reconciliación, nada sobre el pago de reparaciones a las víctimas, ni reafirmación de que no habrá indulto ni amnistía para los autores de crímenes de lesa humanidad, cometidos sea por grupos terroristas, paramilitares o por el Estado mismo.
En materia de descentralización, el presidente Humala confunde esta con reuniones descentralizadas del Consejo de Ministros, y no dice nada sobre desarrollo de capacidades en los gobiernos regionales, ni corrección del proceso de reconcentración del gasto público en el Ejecutivo, lo que refuerza la política centralista e incrementará las demandas de las regiones y provincias.
Es entonces a los pueblos, a las multitudes ciudadanas, a la oposición política de las izquierdas a quienes nos queda la tarea de seguir construyendo las condiciones para los cambios profundos que el país requiere, en democracia, con justicia social y ecológica, con descentralización y luchando frontalmente contra la corrupción, como propone Tierra y Libertad al Perú y busca hacerlo logrando la mayor unidad posible de las fuerzas políticas en el Frente Amplio, para realizar los cambios que los pueblos del Perú demandan.
¡POR UN PERÚ SOBERANO, DEMOCRÁTICO, SOCIAL Y ECOLÓGICAMENTE JUSTO!
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